sábado, 27 de mayo de 2017

Por si regresas. (Ricardo Arjona)

Por si regresas me daré una ducha y pondré el disco Luz de Djavan. 

Por si regresas sigo al pie de lucha, por si regresas, limpiare el desván.

Por si regresas traigo buen semblante aunque me han dicho que me veo fatal. 

La porcelana pulcra en el trinchante y en su gancho cuelgo el delantal. 

Por si regresas me conservo casto por el asunto de economizar. Las energías nunca me las gasto por si un buen día quieres regresar.

Todo está listo por si regresas para que nunca más te quieras ir. El funeral de todos mis defectos se celebró cuando te vi partir.
Todo está listo por si regresas para que nunca más te quieras ir, ya no hallaras huellas de mí en el wáter ni el dentífrico por la mitad.

Por si regresas la luz está pagada y no hay vecina que venga a contar, que se me ha visto persiguiendo bragas, por si regresas me se comportar.

Por si regresas te compre una luna y pinte el techo todito de azul, las nubes son de auténtico hule de espuma y en el jardín te sembré un abedul.

He de contarte que existe un abismo entre el que fui y el que te encontraras y aunque por dentro sigo siendo el mismo seguro que no te arrepentirás.

Todo está listo por si regresas para que nunca más te quieras ir. El funeral de todos mis defectos se celebró cuando te vi partir.
Todo está listo por si regresas para que nunca más te quieras ir, ya no hallaras huellas de mí en el wáter ni el dentífrico por la mitad.

Ya sé que estás de novia de ese tipo que es más tranquilo que un peón de ajedrez. Yo soy de pobre lo que él es de rico y tú mi mujer aunque lo niegue un juez.

sábado, 20 de mayo de 2017

Return to sender. (Elvis Presley)

Le di una carta al cartero y la puso en su saco, pero en la mañana siguiente la trajo de vuelta  trajo de vuelta temprano.

Ella escribió sobre el sobre:  "Devolver al remitente desconocido, no existe ese número, no existe esa zona".

Tuvimos una pelea, y un amante escupió. Ahora escribo lo siento, pero mi carta es devuelta.
Así que la dejo en el buzón para enviarla en días especiales, pero a la mañana siguiente me la trae devuelta temprano. Devolver al remitente...  

Ella escribió sobre el sobre: “Devolver al remitente desconocido, no existe ese número, no existe esa zona".

Esta vez la voy a llevar yo mismo, y la pondré en su mano derecha. Y si se trata de volver al día siguiente, entonces, yo entenderé lo que ella me escribe. 

Devolver al remitente desconocido, no existe esa dirección, no existe esa persona, no existe esa zona.

viernes, 12 de mayo de 2017

Yesterday. (John Lennon y Paul McCartney)

Ayer todos mis problemas parecían tan lejos, 
ahora es como si estuvieran aquí para quedarse.
¡Oh!, yo creo en el ayer

De pronto, 
no soy ni la mitad del hombre que solía ser,
hay una sombra que se cierne sobre mí. 
¡Oh!, de pronto llegó el ayer.

¿Por qué tuvo que irse?, 
no lo sé, no me lo dijo.
¿Dije algo que no debía?
Ahora anhelo el ayer.

Ayer el amor era un juego tan fácil,
ahora necesito un lugar donde esconderme.
¡Oh!, yo creo en él ayer.

Por qué tuvo que irse?, 
no lo sé, no me lo dijo.
¿Dije algo que no debía?
Ahora anhelo el ayer.

Ayer el amor era un juego tan fácil,
ahora necesito un lugar donde esconderme.
¡Oh!, yo creo en él ayer.

martes, 9 de mayo de 2017

Momentos felices. (Gabriel Celaya)

Cuando llueve y reviso mis papeles, y acabo
tirando todo al fuego: poemas incompletos,
pagarés no pagados, cartas de amigos muertos,
fotografías, besos guardados en un libro,
renuncio al peso muerto de mi terco pasado,
soy fúlgido, engrandezco justo en cuanto me niego,
y así atizo las llamas, y salto la fogata,
y apenas si comprendo lo que al hacerlo siento,
¿no es la felicidad lo que me exalta?

Cuando salgo a la calle silbando alegremente
el pitillo en los labios, el alma disponible
y les hablo a los niños o me voy con las nubes,
mayo apunta y la brisa lo va todo ensanchando,
las muchachas estrenan sus escotes, sus brazos
desnudos y morenos, sus ojos asombrados,
y ríen ni ellas saben por qué sobreabundando,
salpican la alegría que así tiembla reciente,
¿no es la felicidad lo que se siente?

Cuando llega un amigo, la casa está vacía,
pero mi amada saca jamón, anchoas, queso,
aceitunas, percebes, dos botellas de blanco,
y yo asisto al milagro ?sé que todo es fiado?,
y no quiero pensar si podremos pagarlo;
y cuando sin medida bebemos y charlamos,
y el amigo es dichoso, cree que somos dichosos,
y lo somos quizá burlando así la muerte,
¿no es la felicidad lo que trasciende?

Cuando me he despertado, permanezco tendido
con el balcón abierto. Y amanece: las aves
trinan su algarabía pagana lindamente:
y debo levantarme pero no me levanto;
y veo, boca arriba, reflejada en el techo
la ondulación del mar y el iris de su nácar,
ido, y nada importa nada,
¿no aniquilo así el tiempo? ¿No me salvo del miedo?
¿No es la felicidad lo que amanece?

Cuando voy al mercado, miro los abridores
y, apretando los dientes, las redondas cerezas,
los higos rezumantes, las ciruelas caídas
del árbol de la vida, con pecado sin duda
pues que tanto me tientan. Y pregunto su precio,
regateo, consigo por fin una rebaja,
mas terminado el juego, pago el doble y es poco,
y abre la vendedora sus ojos asombrados,
¿no es la felicidad lo que allí brota?

Cuando puedo decir: el día ha terminado.
Y con el día digo su trajín, su comercio,
la busca del dinero, la lucha de los muertos.
Y cuando así cansado, manchado, llego a casa,
me siento en la penumbra y enchufo el tocadiscos,
y acuden Kachaturian, o Mozart, o Vivaldi,
y la música reina, vuelvo a sentirme limpio,
sencillamente limpio y pese a todo, indemne,
¿no es la felicidad lo que me envuelve?

Cuando tras dar mil vueltas a mis preocupaciones,
me acuerdo de un amigo, voy a verle, me dice:
«Estaba justamente pensando en ir a verte».
Y hablamos largamente, no de mis sinsabores,
pues él, aunque quisiera, no podría ayudarme,
sino de cómo van las cosas en Jordania,
de un libro de Neruda, de su sastre, del viento,
y al marcharme me siento consolado y tranquilo,
¿no es la felicidad lo que me vence?

Abrir nuestras ventanas; sentir el aire nuevo;
pasar por un camino que huele a madreselvas;
beber con un amigo; charlar o bien callarse;
sentir que el sentimiento de los otros es nuestro;
mirarme en unos ojos que nos miran sin mancha,
¿no es esto ser feliz pese a la muerte?
Vencido y traicionado, ver casi con cinismo
que no pueden quitarme nada más y que aún vivo,
¿no es la felicidad que no se vende?

sábado, 6 de mayo de 2017

Asuntos pendientes. (María Rozalen)

Miré dentro y pensé que algo debe cambiar, no puedo caminar con rencor en la piel y en los ojos la sal. 

Confiar otra vez en la humanidad, disfrutar de tus besos, oler en tus manos toda tu bondad.

Lo cierto es me hiciste mal, lloré ríos, bebí crueldad. Me equivoqué, no supe amar, quiero aprender, andar en la verdad. 

Encontrar la razón de las horas perdidas, entender el perdón como un gesto de amor para toda la vida. Aceptar que hoy es hoy y que ayer fue pasado, que aprender a vivir es saber descubrir que el futuro está actuando. 

Olvidar el dolor de palabras hirientes y cambiar la razón ojos que no te ven corazón que te siente.
Entregarme a la luz cuando llegue el momento y buscarte en mi alma, encontrarte, saber y sentir que no tengo asuntos pendientes. Asuntos pendientes…

No quiero que me duelas más, ni esperar nunca nada de ti.
Quererte así sin disfrazar. Dejando a un lado el mal que viví.

Olvidar el dolor de palabras hirientes y cambiar la razón ojos que no te ven corazón que te siente.
Entregarme a la luz cuando llegue el momento y buscarte en mi alma, encontrarte, saber y sentir que no tengo asuntos pendientes. Asuntos pendientes…