lunes, 31 de julio de 2017

Biblioteca. Julio 17.

Crónica del pájaro que da cuerda al mundo.
     De Haruki Murakami.

Sinopsis: 

El joven Tooru Okada, que acaba de dejar su trabajo en un bufete de abogados, recibe un día la llamada anónima de una mujer. 

A partir de ese momento, la existencia de Tooru sufre una extraña transformación. 

Su mujer desaparece, comienzan a surgir a su alrededor misteriosos personajes, y lo real se degrada hasta cobrar tintes fantasmagóricos. Mientras los sueños invaden cada vez más la realidad, Tooru Okada deberá resolver conflictos que ha arrastrado a lo largo de toda su vida.

Opinión: 

Más de un año es lo que he tardado en realizar mi periplo por la Crónica del pájaro, un periplo que comencé en Berlín a mediados del año pasado y ha finalizado el 2 de Julio después de volver de Perú. 

En este caso, el periplo no es porque sea un mal libro, en absoluto, pero he tenido que leerlo a medias entre otros libros, buscando huecos de tiempo donde no los había,  hasta que al final he encontrado el sabor agridulce del adiós. 

Es un libro complejo, donde nos sumergimos en el mundo de Murakami y deseamos más. Un libro que entremezcla vidas pasadas con el paso del tiempo, sueños con realidad y la verdad con la mentira, un libro que estarán entre esos indispensables a los que recurrir cuándo uno esta agotado. 

En ningún  momento hablaré mucho en sí de los libros, sino de las sensaciones que dejan en mí. Es un libro con partes que inspiran y otras que deseas que pasen veloces, pero fue terminarlo y comenzar con Kafka en la orilla, el cual espero no le pase lo mismo que a este y pueda saborearlo como es debido.  

Marsuf, el vagabundo del espacio.
De Tomás Salvador.

Sinopsis: 

Con “Marsuf el vagabundo del espacio”, Tomás Salvador os demuestra su extraordinaria versatilidad, su gran polifacetismo como escritor, que cultiva tanto el relato, el cuento corto, como la novela realista y la narración futurista. Aquí nos da una visión “planetaria” del siglo XXI, centrada en torno a un vagabundo espacial, un peregrino polizonte a bordo de una nave, “Bandeirante”, que cruza los espacios en viaje de inspección. Aunque esencialmente dirigida a un público juvenil, la desbordante fantasía del autor hace que la lean gustosamente tanto niños, como adolescentes y adultos.

Opinión: 

¡Qué decir! Me ha impresionado. 

Iba con las expectativas bajas de un libro del 77 sobre fantasía espacial, y además de un escritor español que aunque tiene una magnifica obra, como El haragán (sublime), no sabía que había escrito libros de esta índole. 

Y, sin más, me ha sorprendido. Su narrativa excelente nos trasporta lentamente por diversos retazos de la vida de este entrañable vagabundo, que es Marsuf, además de ir solidificando su mundo de manera paulatina y sin prisas. Podríamos hablar de cada historia de un modo independiente, pero el efecto de las primeras junto a las dos últimas hacen que sienta un amor extraño y magnífico por este libro, al punto que descansará en mi estantería junto a El Dador de Lois Lowry (otra obra, imprescindible).


Algo supuestamente divertido que nunca volveré a hacer. 
De David Foster Wallace.

Sinopsis: 

Escritos durante la década de 1990, los ensayos y artículos de Algo supuestamente divertido que nunca volveré a hacer constituyen una de las radiografías más irreverentes e hilarantes de la cultura americana de fin de milenio. En esta obra el autor consigue dar una vuelta de tuerca inédita en la literatura norteamericana. 

Opinión: 

Un ensayo. Pesado (creo que pesado incluso para el propio autor), que nos narra como era un viaje en un Megacrucero en los 90. 

Hay que leerlo como ensayo, como un retazo de una década pasada y con ese encanto quizás podamos disfrutar de su forma metódica y milimétrica de escribir hasta tal punto de describirlo todo con una exactitud que nos podría trasladar al Nadir, al instante donde esta escrito el libro. 

A pesar de todo es una muestra del periodismo gonzo que me ha recordado en muchos aspectos a la magistral obra de Truman, Música para camaleones.

Los secretos que jamás te contaron...
De Albert Espinosa

Sinopsis: 

Cuando nacemos, nadie nos proporciona un manual para aprender a vivir, ni instrucciones para ser feliz. Y, sin embargo, encontrar la felicidad no es tan difícil. En realidad, existen unos secretos para vivir en este mundo que quizá nadie se haya tomado la molestia de explicarte. 

Por eso Albert Espinosa ha querido compartir contigo en este libro los suyos, los que ha ido descubriendo a lo largo de su vida, aquellos que le hacen sentirse vivo, los que le han servido y todo lo que ha aprendido a lo largo de su extraordinario recorrido.

Los secretos que jamás te contaron no es un libro normal, escrito para ser leído sin más; está pensado para que cada persona lo inspire y lo haga suyo.

Opinión: 

Un libro de autoayuda que ayuda más al autor que a quien lo lee, pero sabe sacar una sonrisa, sobre  todo en el último tercio del mismo. 

Un libro que te incita a inspirar, fácil de leer y si vas con la certeza de que las palabras curan, quizás pueda llegarte... aunque si queremos que nos curen las palabras... en 2012 salió un disco homenaje a Lorca (La luna grande) con 18 poemas suyos en la voz nonagenaria de la gran Chavela Vargas, esas letras, como el libro las define, son tijeras dulces para sanar las almas. 

martes, 25 de julio de 2017

Última carta de Julia Conesa Conesa

Madre, hermanos, con todo el cariño y entusiasmo os pido que no me lloréis nadie. Salgo sin llorar. 

Cuidar a mi madre. Me matan inocente, pero muero como debe morir una inocente.

Madre, madrecita, me voy a reunir con mi hermana y papá al otro mundo, pero ten presente que muero por persona honrada.

Adiós, madre querida, adiós para siempre. Tu hija, que ya jamás te podrá besar ni abrazar. Besos para todos, que ni tú ni mis compañeros lloréis.

Que mi nombre no se borre en la historia.

viernes, 21 de julio de 2017

La Habana, 4 de Julio. (Miguel Moyares)

-Abuela, ¿quién te manda a ti esta carta si tú no sabes leer?
-"La Habana, 4 de Julio calle del Embarcadero, plazoleta del Ayer, gaditano habanero," de verdad que no lo sé.

"En la España dividía luchaban los hermanitos que yo luchar no quería y me escondí en un barquito que para La Habana venía.

Pensaba que desertando podría algún día regresar. Fueron pasando los días y cómo yo no encontraba motivos para luchar, dije me quedo en La Habana y ya se me olvidará.

Escribirte no sabía, maldita sea la guerra y que maldita cobardía, ni siquiera 4 letras diciendo que te quería."

-Abuela no queremos verte triste estás mojando el papel.
-Decía el parte de guerra que había desaparecido, ¿cuánto tiempo lo esperé? Y ya lo dí por perdido, hijo, que dolor de él.
-Abuela si tú lo quieres, mi abuelito desde el cielo seguro que te comprende.
-¿Por qué calló tanto tiempo y no calló para siempre?

"Yo no soy ningún cobarde por lo que voy a explicar.

Una voz rajada y fuerte dijo batallón al frente y a tu hermano oí gritar, en un rincón de mi mente, no vayas a disparar.

Mi condena fue mi vida, perdiéndote poco a poco con lo que yo te quería, 60 años de loco, loquito por ti María.

Me está llamando el de arriba y quiero verte antes de irme, quiero decirte María, te escribo para decirte que te quiero todavía.

martes, 18 de julio de 2017

¿Te acuerdas, María? (Nino Bravo)

¿Te acuerdas, María,  que yo te cantaba sentado a la sombra del viejo molino?

¿Te acuerdas, María, que miraban las aguas correr tus ojos moreno flotando en el río? Que ayer nos amamos creciendo en los valles, por los pastizales robaba tus besos, tu pelo muy suelto jugaba en el viento. Yo te quería con todo mi tiempo.

¿Te acuerdas, María, que yo te quería?

¿Te acuerdas, María, qué noche más triste cuando me dijiste que tú te marchabas?

Hoy sólo nos queda el recuerdo y el murmullo del viento que sigue diciendo te acuerdas, María, que ayer nos amamos creciendo en los valles, por los pastizales robaba tus besos, tu pelo muy suelto jugaba en el viento. Yo te quería con todo mi tiempo.

¿Te acuerdas, María, que yo te quería?

¿Te acuerdas, María, qué noche más triste cuando me dijiste que tú te marchabas?

Hoy sólo nos queda el recuerdo y el murmullo del viento que sigue diciendo te acuerdas, María... Te acuerdas, María... Te acuerdas, María, que yo te quería.

viernes, 14 de julio de 2017

Carta para María (José Luis Perales)

Hoy te escribo esta carta mi pequeña María, yo que tanto te quiero, y que todos los días me acuerdo de ti, yo me acuerdo de ti.

Hoy te quiero contar mi pequeña María, que he visto un caracol escaleras arriba, preguntando por ti, preguntando por ti.

Hoy he visto un pájaro amarillo que cantaba una canción, y a una mariposa de colores paseando por el sol. Y he visto a una princesa en su castillo, y a un príncipe feliz cazando grillos, y he visto a una muñeca que dormía, y era igual que tú.

Y he visto a una princesa en su castillo, y a un príncipe feliz cazando grillos, y he visto a una muñeca que dormía, y era igual que tú.

Hoy te quiero contar mi pequeña María,  que subiendo la calle me encontré a Blanca-nieves, preguntando por ti, preguntando por ti.

Hoy te quiero contar  mi pequeña María, que una noche la luna se acercó a mi ventana, preguntando por ti, preguntando por ti.

Hoy he visto un pájaro amarillo que se marchaba volando muy lejos de aquí.


martes, 11 de julio de 2017

Girasoles. (María Rozalen)

Era necesario respirar para mirar alrededor.

Paseo por la Habana y hay un café frente al malecón. Comienzan los recuerdos, las espinas afloraron en mi interior. Todo lo que no se atiende, tarde o temprano reaparece.

Pero nos miramos, vaya no pasamos, a ver si remontamos sin dedicarle más tiempo que el mundo está lleno de mujeres y hombres buenos.

Así que le canto a los valientes que llevan por bandera la verdad, a quienes son capaces de sentirse en la piel de los demás, los que no participan de las injusticias y no miran a otro lado.

Los que nos e acomodan y los que riegan siempre su raíz. A ti mi compañero que me tiendes la mano y que es tu corazón bondad, me estudias con curiosidad, me miras con respeto y besas con cariño cada parte de mi cuerpo.

Tienes en los ojos girasoles y cuando me miras soy la estrella que más brilla. Cuando ríes se ilumina todo el techo y ya duermo tranquila,  porque siento tanta calma dentro.

Es necesario revivir para poder saborear. Encajo las ideas, reflexiono  para mejorar. Antes de un gran impulso doy un paso pequeñito para atrás.

Todo lo que no atendí vuelve siempre a resurgir pero sonreímos, vaya si vivimos todo lo que aprendimos. No le dedicare más tiempo pues el mundo está lleno de mujeres y hombres bueno. 

Así  que le canto a los coherentes, a los humildes que buscan la paz. A los seres sensibles que cuidan de otros seres y saben amar. A todos lo que luchan por nuestros derechos y miran a todo hombre igual. 

A quienes no me juzgue y quien esté dispuesto a compartir. A ti mi compañero que tienes alma pura, que es tu corazón bondad, respeta mi espacio vital, me escuchas bien atento y besas con cariño cada parte de mi cuerpo. 

Tienes en los ojos girasoles y cuando me miras soy la estrella que más brilla. Cuando ríes se ilumina todo el techo y ya duermo tranquila,  porque siento tanta calma dentro.

viernes, 7 de julio de 2017

Bocas prestadas. (Leonor Watling)

Bajo el asfalto, el adoquín.
Bajo el adoquín, la piedra.
Bajo la piedra, el camino.
Bajo el camino, tierra. 

Bajo la arruga, un niño.
En el cabello, viento.
En la memoria, un puño.
Entre los dedos, tiempo.

Vamos dando pasos sobre calles pisadas.
Vamos dando besos sobre bocas prestadas.

Bajo la cama, historias.
La historia bajo un cuento.
Bajo el cuento, la nana.
Y con la nana, el sueño.

Vamos dando pasos sobre calles pisadas.
Vamos dando besos sobre bocas prestadas.

Paso a paso te he buscado.
Beso a beso te he encontrado.

En la lluvia el domingo.
Bajo el domingo, tiempo.
Con el tiempo, la risa.
En la risa, el niño.

Vamos dando pasos sobre calles pisadas.
Vamos dando besos sobre bocas prestadas.

Paso a paso te he buscado.
Beso a beso te he encontrado.